Abraham Onofre / Nacional.
Una mañana que comenzó con el estruendo de petardos y el olor a quemado, marcó el último episodio de violencia protagonizado por estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos”. El pasado lunes 8 de abril, al menos 200 jóvenes encapuchados llegaron en cinco autobuses a las puertas del Palacio de Gobierno en Chilpancingo, Guerrero, para perpetrar actos vandálicos por motivos del trágico fallecimiento de Yanqui Kothan Gómez Peralta, ocurrido hace un mes a manos de presuntos policías estatales.
La protesta estudiantil, que se convirtió en un caos para los trabajadores del gobierno y los residentes cercanos, comenzó alrededor de las 8:30 horas cuando los normalistas arrojaron petardos contra los cristales del edificio gubernamental. El estallido de los artefactos y el humo de las bombas molotov llenaron el aire, mientras los estudiantes incendiaban una camioneta oficial en la entrada principal y posteriormente prendían fuego a otros cinco vehículos compactos en el estacionamiento.
La violencia desatada por los normalistas se prolongó durante unos 25 minutos, sumiendo en el miedo y la confusión a quienes se encontraban dentro y fuera del Palacio de Gobierno. Negocios cercanos cerraron sus puertas como medida de precaución ante posibles ataques.
Una vez cumplido su cometido, los estudiantes se retiraron hacia su institución educativa en Tixtla, dejando tras de sí el rastro de destrucción y caos. Las autoridades de Protección Civil y los bomberos llegaron al lugar para sofocar los incendios y evaluar los daños ocasionados.
Es importante recordar que este acto de violencia estudiantil surge en el contexto del asesinato de Yanqui Kothan Gómez Peralta, quien perdió la vida en un enfrentamiento con presuntos policías estatales en el crucero a Tixtla. Como medida de seguridad, el Palacio de Gobierno y otras instalaciones gubernamentales habían sido blindadas con placas de metal de tres metros de altura, las cuales fueron retiradas recientemente, antes de este nuevo incidente.