** La reapertura del templo estaba prevista desde el año pasado, pero el temblor del 19 de septiembre, ocasionó daños que retrasaron las labores de rehabilitación del edificio**
Ciro De Gante Fortoso / Tecomatlán, Pue.
El jueves 28 de junio, Teodoro Enrique Pino Miranda, obispo de la diócesis de Huajuapan de León, Oaxaca, procedió a bendecir las instalaciones remozadas del templo de San Pedro, Santo Patrono de Tecomatlán, informó Gerardo Mora Paz, párroco del lugar.
En las invitaciones al acto solemne, se dieron a conocer los motivos de la remodelación: “Buscamos no sólo poner de manifiesto y resaltar los valores arquitectónicos y religiosos que contiene, como joya que es del siglo XVII, sino que a través de su belleza artística, conforme un ambiente de elevación, de plenitud de ánimo, que la distinga, a los ojos de los ciudadanos del municipio, de la región y del país, y la coloque como uno de los templos de mayor espiritualidad”; comunicó Miguel Merino Merino, presidente del Comité de la Fiesta de San Pedro.
Las hermandades de todos los poblados del municipio se dieron cita a las tres de la tarde del pasado jueves, en el centro comercial La Perlita, para iniciar la procesión que recorrió las principales calles de la población para arribar finalmente al templo.
Asimismo, se convocó a toda la población para que se concentrara en el amplio atrio y participaran en este acto solemne.
La ceremonia fue presidida por su Excelencia Teodoro Enrique Pino Miranda, obispo de la diócesis con sede en la ciudad de Huajuapan de León, Oaxaca, abundó el párroco, quien dijo que: “el señor obispo nos hará el honor de volver a bendecir el templo, para restablecer su carácter de recinto sagrado, y oficiará la primera misa”.
La reapertura del templo estaba prevista desde el año pasado, pero el temblor del 19 de septiembre, ocasionó daños que retrasaron las labores de rehabilitación del edificio. Finalmente se concluyó la obra, y con gran entusiasmo los tecomatecos esperaron que el reloj marcara las 6:00 de la tarde del jueves 28 de junio, para volver a ingresar a su querida y venerada iglesia.