Marilú N tenía cuatro años de edad cuando fue violada por su propio padre y su abuelo durante una semana y media, esto sucedió cuando su madre accedió a que la niña los conociera y pasara un tiempo con ellos, al darse cuenta de la situación Matilde N, colocó una denuncia, la cual ha sido detenida por el juez Aarón Hernández Chino, quien rechaza la versión de la niña y los exámenes ginecológicos.
Derivado de la situación de terror por la que atravesó la niña a manos de Iván N y Jaime N, Marilú perdió el habla durante dos años completos, cuando su madre noto de inmediato que algo había sucedió en casa del padre y abuelo de la menor llevo a la infanta con especialistas.
Patricia abuela materna de la niña decidió demandar a los hombres que violentaron a su nieta, pero a lo largo de dos años se ha encontrado con grandes obstáculos por parte de la burocracia judicial que le pidió que la pequeña tenía que declarar y era imposible, según lo afirma la causa penal 1078/2021.
Este atroz hecho ocurrió en el 2019, la abogada y abuela detalló que la pequeña, de ahora seis añitos, fue violada entre su padre y su abuelo, provocándole un trauma psicológico, el cual notó cuando la niña volvió a casa y empezó a tener cambios totalmente diferentes, no comía y bajó hasta ocho kilos de peso y ya no quería hablar.
Al tener una explicación médica, la madre de Marilú decidió alzar la voz e interponer una denuncia en contra de Iván N y su ex suegro, Jaime N por el delito de violación, sin embargo, la denuncia no procedió inmediatamente.
Al llevar a Marilú con médicos, Matilde interpuso una denuncia contra Iván y Jaime por delito de violación, a pesar de las pruebas demostradas, la denuncia no procedió.
El horror por el que pasó Marilú fue tan grande que no habló desde 2019 hasta febrero de 2021, cuando después de años de terapias y tratamientos psicológicos, logró contar lo que le hicieron su padre y su abuelo.
Los presuntos abusadores fueron detenidos y el pasado 17 de junio, se realizó la primera y única audiencia en donde participó como juez de control Aarón Hernández , quien ordenó la liberación inmediata de los dos hombres, bajo el argumento de que su arresto fue ilegal.
En plena audiencia el juez mostró poco interés en el caso, bostezó 20 veces y mantuvo una actitud en todo momento de fastidio, como si ya su resolución estuviera predeterminada en que los dejaría libres, a pesar de que se cometió el delito de violación en contra de una niña, así lo declara la abuela de Marilú.
La familia de la niña a mandado un escrito al gobernador, Miguel Barbosa, para que atraiga el caso, pues la justicia en este caso no ha llegado y lo peor es que el juez considera que ella debe vivir con los acusados.