Una estudiante de enfermería y su pareja de 18 años, secuestraron, sedaron, golpearon y ahorcaron a un niño de tres años, por el que pedían una “mínima” cantidad de rescate, según la Fiscalía General del Estado (FGE).
Fue el pasado 9 de abril, que Emiliano de tan solo 3 años de edad, salió a una tienda ubicada junto a su casa, en el poblado C-31 de Huimanguillo, Tabasco. Fue la última vez que la familia lo vio con vida.
Al día siguiente, sus familiares denunciaron su desaparición en redes sociales: “Es mi hijo, está perdido, ayuden a compartir fue visto por última vez en el poblado C-31, Huimanguillo Tabasco. A las 3:30pm. Ayúdalo a regresar a casa Dios te lo pido”, escribió su madre en un texto en redes sociales acompañado con la foto del menor.
Tras las investigaciones, la FGE, luego de más de 72 horas de búsqueda, el cuerpo del menor apareció dentro de una caja de cartón en una casa de seguridad ubicada sólo a dos casas de su hogar.
El niño llevaba tres días de fallecido, con señales de que fue asfixiado el mismo día que lo secuestraron; presentaba también diversas costillas rotas con rastros demaltrato y golpes.
Por este hecho, se detuvo a una estudiante de enfermería de 26 años que vive a tres cuadras de la casa del menor y a su pareja de 18 años, oriundo de la misma comunidad, quienes confesaron que el niño se encontraba en una casa del poblado C-32.
Al catear la vivienda, elementos de la FGE y de la Procuraduría General de la República (PGR) hallaron el cuerpo sin vida del niño, dentro de una caja de cartón, con fracturas en las costillas, huellas de estrangulamiento y medicamento para mantenerlo dormido.
Además fue detenida una mujer de la tercera edad, identificada como Dora Pablo, propietaria de la tienda donde acudió el menor.
(Con información de Proceso y Excélsior)