Redacción.
Presuntamente al mediodía del pasado 15 de enero, la Arquidiócesis Primada de México comunicó que la Curia del Arzobispado de México, recibió la noticia sobre la ejecución de una orden de aprehensión en contra de uno de sus sacerdotes, en la cual lo acusaban de presunto abuso sexual en agravio a un joven.
Por lo que dieron activación al protocolo de intervención correspondiente, debido al posible Abuso sexual de un niño, niña, adolescente o adulto vulnerable de la Arquidiócesis.
Se presume que el sacerdote fue detenido y llevado a prisión, además de que la Arquidiócesis de México, ya aplico medidas cautelares en apego en el c. 1722 del Código de Derecho Canónico y numerales 58 a 65 del Vademécum sobre algunas cuestiones procesales ante los casos de abuso sexual a menores cometidos por clérigos.
Cabe señalar que dentro de las medidas que se le aplicaron a un clérigo acusado de un delito del sexto mandamiento, contra un menor o persona vulnerable, fueron las siguientes:
Prohibición temporal de celebrar públicamente los sacramentos, especialmente la Santa Misa. Por lo tanto, sólo podrá celebrar de manera individual o bien, con dos o tres asistentes que serán mayores de edad.
Prohibición temporal de ejercer actividades pastorales, especialmente con menores de edad y personas vulnerables.
Prohibición de comunicarse con la presunta víctima o sus familiares.
Imposición temporal de un domicilio específico dentro de la Diócesis. Generalmente no será una parroquia, sino un domicilio particular o una casa donde vivan diversos sacerdotes.
Aunque hasta el momento el sacerdote está preso, se desconoce si podrá quedar en libertad o si terminará la investigación civil.
Por lo antes mencionado la arquidiócesis informó que, hasta el momento, no han recibido alguna denuncia sobre lo antes mencionado, por lo que también confirman que presuntamente los hechos no ocurrieron en algún recinto eclesial, tras esto la Asociación Religiosa estará al pendiente de cualquier requerimiento o información que solicite la fiscalía y las demás autoridades competentes, además de que la Arquidiócesis de México se pone a disposición de la víctima o cualquier otro denunciante.