El lunes 16, el periodista Jenaro Villamil presentó en la ciudad de Puebla su más reciente libro: “La rebelión de las audiencias. De la televisión a la era del trenging topic y el like”. El acto fue en el paraninfo de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, en su sede histórica del edificio Carolino.
El autor es uno de los más prestigiados periodistas de México, con una gran experiencia en la revista Proceso y, por lo que revela en sus escritos, un agudo investigador.
Dividido en cuatro partes, el libro hace un análisis del tránsito de la información a través de la prensa, la radio y la televisión, hacia las redes sociales; es certero en describir esa transición y sus efectos en las audiencias otrora cautivas de la televisión.
Paso a paso relata, en el segundo capítulo, la historia de la televisión en México y su modelo singular que él llama la “fórmula mexicana”: una empresa privada que responde a las leyes del mercado, pero con una dependencia estrecha con el poder presidencial.
La sola lectura de este segundo capítulo lleva al lector a conocer y valorar los entretelones de la principal empresa televisora: Televisión Vía Satélite, S.A. (Televisa) y de su par Televisión Azteca, fruto de la privatización de la televisora estatal Canal 13.
Describe la aplicación de la “fórmula mexicana” a través de los vínculos políticos de los Azcárraga con el Partido Revolucionario Institucional y, en especial, con el presidente en turno, desde Miguel Alemán Valdés, a finales de los años 40 del siglo pasado.
Esta historia da pie para plantear la crisis de la televisión que se agudizó con la llegada al poder de Enrique Peña Nieto, cuyo ascenso la opinión pública lo relacionó desde ante de las elecciones con la inversión del poder de Televisa, convertida de institución al servicio del poder a un poder fático cuyo apoyo consideran clave los políticos.
Hoy, como lo puntualiza Jenaro Villamil, la televisión se enfrenta a una audiencia muy diferente a la del siglo pasado; gracias a las redes sociales hay una audiencia crítica que rebasa a los telenoticieros y aún cuando está expuesta a la difusión de noticias falsas, es una audiencia que ha rebasado las estrategias informativas desde el poder. Es una audiencia rebelde.
¿Pasos hacia una alianza?
El viernes se dio a conocer que la aspirante a una candidatura independiente para la Presidencia de la República Margarita Zavala Gómez del Campo, expanista y esposa de Felipe Calderón Hinojosa, ha nombrado un nuevo coordinador de proyecto. Se trata de Fausto Barajas Cummings, hasta ahora director de la Fundación de Desarrollo Humano Sustentable, que preside el exmandatario.
El cambio, que deja fuera a Fernanda Caso Prado, quien acompañó a Margarita Zavala desde su campaña al interior del Partido Acción Nacional y continuó con ella tras su salida de ese instituto político.
El cambio no tendría mayor importancia si no fuese por dos detalles.
El primero es que Fausto Barajas dirige la fundación que preside Felipe Calderón, lo que pone en evidencia que la lucha de Margarita Zavala por la candidatura es la lucha de Felipe Calderón por regresar al poder; ahora será Fausto Barajas quien se encargará del proyecto de la aspirante presidencial.
Pero hay algo más. De acuerdo a la nota publicada en Proceso y firmada por Álvaro Delgado, Fausto Barajas está relacionado con Luis Videgaray, José Antonio Meade y con el actual presidente del Senado, el panista Ernesto Cordero.
Esto crea la sospecha de que la candidatura independiente de Margarita Zavala forma parte de la alianza Peña-Calderón, de la que ha dado cuenta el periodista Álvaro Delgado en su libro “El Amasiato”.