El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador anunció que enviará hoy a los diputados su nueva reforma electoral, con el cual se pretende que no haya cambios en la Constitución, pero con el cual se buscará la austeridad en el Instituto Nacional Electoral (INE) y frenar la compra de votos.
En su conferencia matutina, desde Campeche, López Obrador señaló que sí existen puntos que se pueden cambiar en las leyes electorales, sin transgredir la Carta Magna, esto al reconocer que, Morena no cuenta con mayoría calificada en la Cámara de Diputados para sacar adelante la reforma.
Destacó que la iniciativa que enviará va a priorizar dos puntos, una que el INE ajuste su presupuesto al compactar oficinas, para generar ahorros, y la segunda especificar en la ley la prohibición del uso de recursos públicos para la compra del voto.
“Lo que no va a pasar por la falta de votos es la reducción de dinero a los partidos, la reducción de diputados, pero vamos a buscar compactar oficinas y controlar la compra del voto, que no se facilite, va especificado en la ley, como es la entrega de despensas, materiales de construcción, uso presupuesto público”, sostuvo.
“El INE claro que sí se toca y se debe de tocar, que se sepa que la mayoría de la gente quiere la reforma”, precisó el ejecutivo, al insistir que el Instituto protege a la mafia del poder y los conservadores que piensan que teniéndolo bajo control pueden cometer fraudes.