El premio Nobel de Química, Mario Molina, recomendó utilizar en todo momento el cubrebocas, con el fin de prevenir los contagios de COVID-19, dejando en claro que este si ayuda; contradiciendo así la versión de Hugo López-Gatell.
Al inicio de la pandemia en México, López-Gatell afirmó que el uso del cubrebocas era poco eficaz, puesto que esto podría generar una falsa confianza en las personas, además de que sería peligroso el mal uso del mismo. Sin embargo, a finales de abril el funcionario indicó que el tapabocas sí sería de utilidad para evitar enfermedades respiratorias.
“Se acostumbra uno fácilmente a usarlos, pero hay que tener los cubrebocas puestos todo el tiempo. Eso es lo que queremos explicarle a la sociedad, para que cuando salgan a la calle, o cuando los niños vayan a las escuelas como en China y Asia, estén usándolos, porque así se evita la transmisión de la enfermedad”, precisó durante la conferencia del Gobierno capitalino.
El investigador comentó que, con el uso adecuado de las mascarillas, los contagios se pueden evitar. “Hay una diferencia enorme al usarlas: antes pensaban que eran importantes solo si uno estaba enfermo para no contaminar a otros, pero es un grave error. Demostramos que son muy importantes también simplemente al hablar, para que yo no contamine. Ni siquiera tenemos que estar muy cerca. Si hay buena ventilación, no es tan problemático, pero si no, puede trasladarse a mayores instancias de lo que consideramos una ‘sana distancia’. Por fortuna, los cubrebocas lo pueden parar”, afirmó.