Por Nicolás Dávila Peralta
La noche del 10 de marzo de 2023, dos reporteras de Enlace Noticias e integrantes del colectivo feminista “Marea Purpura” de Izúcar de Matamoros, fueron detenidas de forma arbitraria por policías municipales, aisladas, desnudadas y agredidas por estos elementos que debieran ser garantes de la seguridad ciudadana. Uno de ellos justificó las agresiones con estas palabras: “son órdenes de la jefa”.
Las víctimas, liberadas en la mañana del día siguiente, presentaron sendas demandas ante la Fiscalía General del Estado, donde el caso fue registrado con el número de expediente FGEP/CDI/FECC/MUN-1/000187/2023; siendo asi que recurieron a tres fiscalias especializadas de Puebla, como lo fue la Especializada de Combate a la Corrupción,Violencia de Género y Derechos Humanos, además los hechos fueron expuestos ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla y ante la Fiscalía General de la República, la cual turnó la queja a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra de la Libertad de Expresión, al tratarse de dos reporteras; así se abrió la causa penal 801/2023.
Ha pasado casi un año; el proceso ha sido lento y los culpables materiales e intelectuales de este acto represivo parecían intocables; a pesar de las investigaciones realizadas por los agentes federales quienes acudieron a Izúcar de Matamoros para abundar en el caso.
Hasta el 22 de enero todo parecía estancado; las víctimas en espera de justicia y los implicados en los delitos contra las reporteras y demás personas afectadas, despreocupados o con demandas de amparo ante la justicia federal.
Sin embargo, el 23 de enero, el Centro de Justicia Penal Federal en el Estado de Puebla comunicó la fecha de la audiencia inicial para formular imputación contra los implicados en este atentado en contra de la libertad personal y la libertad de expresión.
De este modo, se constata que la justicia federal ha respondido, según los tiempos del proceso legal, a la demanda de justicia presentada por las compañeras reporteras y demás víctimas de las acciones ilegales de las autoridades del municipio de Izúcar de Matamoros. No es un asunto meramente administrativo, los indiciados están a punto de ser sometidos a un proceso penal.
Esta audiencia inicial incluye a los actores materiales de los hechos del 10 de marzo: seis agentes de la Policía Municipal, mismos que deberán presentarse en el Centro de Justicia Penal Federal en la ciudad de Puebla, en el día y la hora señalada por las autoridades de justicia federal.
La audiencia a la que son citados los presuntos culpables y las víctimas constituye un signo de que la justicia avanza en el caso de las reporteras y las demás personas víctimas de una acción que muestra la prepotencia de las autoridades y la arbitrariedad con la que actuaron los agentes de Seguridad. Falta, sin embargo, aclarar si los agentes actuaron por propia iniciativa, porque existe la presunción de que hay autores intelectuales, como lo muestra la frase imprudente de uno de los policías: “son órdenes de la jefa”.
En un trienio marcado por la incapacidad de las autoridades municipales para brindar seguridad a sus ciudadanos, por el uso arbitrario de los recursos públicos y por la prepotencia, este paso que da la autoridad encargada de impartir justicia a nivel federal deja ver que nadie puede atentar en contra de la seguridad de los ciudadanos, violentar la libertad de información, fabricar delitos y escudarse en un cargo público para actuar impunemente.
Es claro que existen funcionarios que se han mareado por el mínimo poder que el voto les ha concedido y que los hace sentirse todopoderosos, no servidores, sino dueños absolutos del poder. Esta falsa percepción de lo que es un cargo público, es lo que lleva a personas de último nivel tanto de educación como de vocación de servicio, pero enajenadas por el mínimo poder que ejercen, a atentar contra la vida e integridad de quienes se atreven a señalar sus errores y se niegan a ser mercenarios del periodismo.
Sin embargo, este es sólo un caso; en los últimos años han sido muchos los periodistas asesinados, encarcelados o amenazados por presidentes municipales o caciques locales por alguna información u opinión que les afecta.
Asimismo, Enlace Noticias ha dado cuenta de muchas acciones arbitrarias de la Policía Municipal: agresiones a ciudadanos inocentes, detenciones violentas injustificadas y, sobre todo, la incapacidad de los elementos de Seguridad para prevenir los delitos y detener a los delincuentes. Izúcar es uno de los municipios más inseguros del estado de Puebla.
Esperemos que el proceso siga su curso y los culpables de la privación ilegal de la libertad, la fabricación de delitos, la tortura física y psicológica en contra de las compañeras reporteras y las personas defensora de los derechos de la mujer, sean castigados, junto con los autores intelectuales -si los hay-, y esto sirva como un aviso para quienes ostentan cargos públicos y se sienten intocables. El mensaje es claro: ninguna autoridad es para siempre y tendrá que responder ante la sociedad y ante la justicia, si es necesario, por las acciones ejecutadas al amparo de un cargo público.
Y doña “X” regresó de España
Los días 11 y 12 de este mes de febrero, la candidata de “Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez estuvo en España. De acuerdo con el programa previsto, se reuniría con mexicanos residentes en la península ibérica, con autoridades del gobierno español, empresarios, intelectuales y políticos de derecha.
Pero doña “X” no pudo reunirse con el presidente de Gobierno ni con el dirigente del principal partido de derecha, el Partido Popular; a su invitación acudieron empresarios de segundo nivel, la reunión con mexicanos se empañó con la presencia de Felipe Calderón Hinojosa, quien vive en España desde 2022 y el principal intelectual con el que se reuniría, el escritor Mario Vargas Llosa, no se logró. El dirigente de la Fundación Internacional para la Libertad delegó a su hijo para que se reuniera con la candidata de la oposición, tampoco éste llegó y la señora fue recibida por el subdirector de la fundación Gerardo Bongiovanni.
Sus discursos y sus declaraciones a la prensa española fueron intrascendentes; se dedicó a desprestigiar al gobierno mexicano y a ofrecer al gobierno español, con el que nunca se reunió, una estrecha colaboración.
Pero no todo fue negativo, doña Xóchitl Gálvez, la “pobre” que se hizo millonaria vendiendo gelatinas, se hospedó junto con su equipo en uno de los mejores hoteles de Madrid: el hotel Bless, cuyo precio por noche supera los 7 mil pesos mexicanos.