Juan Rubio / Chiautla de Tapia, Pue.
La historia de Wendy y Vanesa, originarias de la Mixteca poblana, inició cuando Zoé Robledo, director del Instituto Mexicanos del Seguro Social, las invitó a cantarle una canción al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante uno de sus eventos.
Estas talentosas hermanas tienen un grupo musical llamado “Wendy Vanessa y Su Norteño Banda”, pues además de componer y cantar, también tocan instrumentos musicales.
Este gesto las llevó a la fama y además a contar con 900 seguidores en su cuenta de TikTok, en donde suben todos los eventos en los que han participado, ya sea ensayos, ferias, jaripeos y fiestas patronales.
A medida que su talento ha ganado reconocimiento, sus canciones se han colocado en plataformas como AppleMusic y Amazon Music. Recientemente, las hermanas se presentaron en las calles del zócalo de Puebla, ante la admiración de varios que disfrutaron de su música.
Wendy y Vanesa son un ejemplo de lo que se puede alcanzar a través del esfuerzo y talento.
A través de casos como el de Wendy y Vanesa muchos hermanos descubren la magia de la música como forma de liberación. Logran convertir un sueño en realidad y abrirse paso hacia la fama. Un escenario que, gracias a las nuevas tecnologías, se volvió mucho más accesible para los artistas, quienes ven en la música un medio para expresar su creatividad y empoderamiento.
Estas hermanas han demostrado que el arte de la música no solo es una forma de entretenimiento, sino también de representar la cultura mexicana. Su talento, además de cautivar a las personas, inspira a muchos adolescentes que trabajan duro para aprovechar una oportunidad de destacar. La historia de Wendy y Vanesa es prueba de que, con esfuerzo, creatividad y amor por la música, es posible alcanzar un lugar en la industria musical.