Los equipos de rescate en Estambul y Atenas auxiliaron a conductores atrapados en sus vehículos, debido a que las carreteras quedaron paralizadas tras el paso de un frente frío que arrojó nevadas en gran parte de Turquía y Grecia, dejando innumerables personas y autos varados durante la noche con temperaturas bajo cero.
En algunas zonas se acumularon más de 80 centímetros de nieve, alrededor de 3 mil 500 personas habían sido evacuadas en las primeras horas del martes, pero unos mil 200 autos seguían atascados en el Attiki Odos, la principal vía de circunvalación de la capital, dijo el portavoz del Gobierno, Giannis Oikonomou.
Los rescatistas y el ejército trabajaron durante la noche para limpiar de una manera más rápida las carreteras y autopistas, pero los vehículos abandonados limitaron su labor. El Gobernador de Estambul, Ali Yerlikaya, pidió a los conductores que regresen por sus autos para moverlos.
Algunos de los conductores varados pasaron la noche en sus coches, mientras otros, los dejaron atrás y regresaron a casa caminando o en transporte público.
En Atenas, los operarios trabajaban para liberar a bastantes conductores que seguían atrapados en una importante autopista que cruza la capital y la conecta con el aeropuerto de la ciudad.