Hipólito Contreras / Puebla, Pue.
El pasado 23 de marzo se cumplieron 25 años de la muerte del entonces candidato presidencial Luis Donaldo Colosio, asesinado al finalizar un mitin en Lomas Taurinas, en la ciudad fronteriza de Tijuana, Baja California. Sus restos están sepultados en el panteón municipal de Magdalena de Kino, la tierra de sus orígenes.
Luis Donaldo Colosio fue el secretario de Desarrollo Social (Sedesol) durante los últimos años del gobierno de Carlos Salinas de Gortari y después se convirtió en el candidato del PRI a la Presidencia de México.
Como aspirante a dirigir la nación, se ganó el cariño y la confianza de los mexicanos al pronunciar ante miles de simpatizantes, el discurso con el que es recordado como un político que buscaba mejorar la seguridad, las finanzas y la calidad de vida en el país.
“Yo veo un México con hambre y con sed de justicia. Un México de gente agraviada, por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían de servirla. De mujeres y hombres afligidos por abuso de las autoridades o por la arrogancia de las oficinas gubernamentales”, dijo Colosio el 6 de marzo de ese año.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo en su conferencia matutina del viernes, desde Palacio Nacional, que sigue lamentado la muerte del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, y reveló que cenó con él dos días antes de que lo asesinaran en Tijuana.
El pasado viernes, los padres de Mario Aburto, señalado como asesino de Colosio, solicitaron a través de una carta reabrir el caso del asesinato del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio, y el mandatario consideró que se debe seguir investigando este asunto.