Después de dos años de suspensión por la pandemia de Covid-19, Tepeaca vuelve a recibir a miles de personas que llegaron al Santuario del Santo Niño Doctor, donde se reúnen cada 30 de abril para cantarle las mañanitas y ofrecer ofrendas por los milagros concebidos.
Esta santo es muy venerado por aquellos que buscan sanar sus dolores físicos y, a decir de los feligreses, el Niño Doctor les ha concedido innumerables milagros, los cuales siempre agradecen.
La historia de esta imagen en Tepeaca data del año 1942, a partir de esa fecha los creyentes católicos empezaron a festejar su llegada y desde entonces aseguran ser testigos de sus milagros, por lo que a través de los años miles de personas se dan cita al templo para venerarlo.
Durante la fiesta patronal, la imagen del niño Jesús recibe regalos como flores, dulces y juguetes, estos últimos son depositados en urnas en el atrio de la iglesia y posteriormente son obsequiados a menores de escasos recursos económicos.