Donald Trump, presidente de Estados Unidos, llegó este jueves a Londres en medio de un fuerte dispositivo de seguridad y de diversas protestas en el centro de la ciudad.
El mandatario arribó a la capital británica proveniente de Bruselas, Bélgica, donde se desarrolló la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Llegó acompañado de su esposa Melania Trump en el avión presidencial Air Force One. Realizará una visita de cuatro días y tiene previstas reuniones con la primera ministra británica, Theresa May, y con la reina Isabel II.
Su llegada se realiza en medio de una serie de protestas que se realizan en la capital británica, particularmente en las inmediaciones del Palacio de Buckingham y el castillo. En ambos lugares emblemáticos, el presidente Trump sostendrá actividades privadas.
Un grupo de manifestante se dio cita desde el mediodía en las afueras de Winfield House, la residencia del embajador de Estados Unidos en Londres, donde Trump y su esposa se hospedarán esta noche, frente al céntrico Regent’s Park.
Durante las protestas que se prevén este viernes por el arribo de Trump, destaca el caso del inflable de seis metros de altura volará en las inmediaciones del parlamento de Westminster con una efigie de Trump, quién es retratado como un bebé enojado de color naranja.
Los organizadores de la marcha “Stop Trump” (Detengan a Trump) informaron que unas 50 mil personas participarán en las protestas.
Sin embargo, la agenda del presidente está planeada para que Trump no visite el centro de Londres y evite las distintas manifestaciones en su contra.
Esta noche, el mandatario asistirá a una cena de gala en el Palacio de Blenheim, el lugar de nacimiento del primer ministro Winston Churchill, que se ubica a unos 15 kilómetros al oeste de la ciudad de Oxford.
Mañana viernes el presidente sostendrá reuniones bilaterales en Chequers, la casa de campo de la primera ministra Theresa May, que se ubica a 70 kilómetros del centro de esta ciudad.
(Con información de Aristegui)