Redacción / Ciudad de México.
René Juárez Cisneros, presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dio a conocer que no llegó al partido a realizar una limpia, sino a sumar y abrir las puertas para ganar la elección del próximo 1 de julio. “Yo no vengo a hacer limpia en el PRI; vengo a incluirme e invitar a todos; vengo a definir responsabilidades para agruparnos”, sostuvo.
Tras pedir a la gente razonar su voto, “porque un momento de enojo en las urnas se puede traducir en seis años de frustración”, comentó que su trabajo es ser dirigente de un partido y no trabajar en un panteón: “Así es que yo no vengo a enterrar a nadie; yo llego en un momento crítico y difícil de una elección compleja y estoy haciendo mi máximo esfuerzo”.
Juárez Cisneros señaló que la responsabilidad de una elección de esta envergadura no es solamente del presidente del partido, sino de todos los militantes; por ello explicó que el PRI se consolidará en el segundo lugar rumbo al tercer debate, pero a partir del día 13 de junio seguirán haciendo campaña con la gente a fin de ganar simpatías para el día de la elección.
Mencionó que el tiempo de la elección se acaba y por ello se siguen tomando decisiones que aseguren un triunfo; sin embargo, adelantó que continuarán apoyando a los sectores que han mostrado simpatía con la propuesta de Meade, así como con los militantes de otras fuerzas que tengan afinidad, como el caso de Ernesto Cordero o Silvano Aureoles, panista y perredista que se sumaron a la campaña del abanderado presidencial priista.