Hipólito Contreras / Opinión Libre
Por todo México, el litro de gasolina ya superó los 20 pesos el litro, pero cada día suben centavos, de modo que a fin de año podría andar por los 25 pesos, sin duda, México es un país petrolero pero con la gasolina más cara del mundo.
El robo de gasolina empezó no hace mucho, cuando el precio de la gasolina comenzó a subir, a rebasar los 15 pesos el litro. Las autoridades no han podido frenar el robo aun con los cientos y miles de decomisos de gasolina robada y detenciones de los responsables.
Por el robo de gasolina el gobierno federal ha perdido miles de millones de pesos, muchas vidas humanas y se ha roto la tranquilidad en cientos de municipios.
Lo que el gobierno ha querido ganar con el aumento a la gasolina lo ha perdido con el robo de la misma, ha salido perdiendo por querer captar más recursos.
A medida que el gobierno sigue subiendo los precios de los combustibles, al mismo tiempo crece el robo de los mismos, es una causa efecto, el gobierno aumenta, el robo crece.
Los que afirman que la gasolina sólo la usan los ricos y que por lo tanto no afecta a los pobres, es falso, hay miles, quizás millones de unidades viejas que tienen los pobres porque con ellas trabajan, es su herramienta de trabajo, un auto viejo es el que supera los 15 años. De modo que el alza afecta más a los pobres que a los ricos, además, todo aumento a las gasolinas repercute en un alza generalizada pues todo se mueve con gasolina, el aumento es inflacionario.
Bien, pues con esta realidad estamos en plenas campañas políticas de candidatos a los diversos cargos de elección, los ciudadanos son bombardeados por propuestas de unos y otros, todos prometen todo, todos prometen una vida mejor, todos dicen: “Voten por mi porque soy la mejor opción”.
Las clases medias altas del país quien sabe qué digan o piensan porque aunque tienen lo suficiente para vivir bien, no creo que estén tan contentos con los elevados precios de las gasolinas, de modo que hasta ellos pueden estar inconformes.
La mayoría en el país, de 70 a 80 millones de mexicanos están muy molestos por lo que pasa en el país, no sólo por el aumento constante de las gasolinas sino por la violencia y la inseguridad en general que se vive. Los medios dan a conocer todos los días la ola de violencia en cada uno de los estados del país.
¿Cómo pueden o quieren los que controlan y gobiernan el país que voten por ellos con esa realidad que se vive? El pueblo de México no puede votar por los responsables de esta situación, no puede votar por los que tienen hundido al país en la violencia, la inflación y la pobreza.
Sin embargo, en México sucede lo increíble, millones votan por los dos partidos que gobiernan el país, acarreados o no, pero están en los mítines, en los eventos y en las urnas, ellos votan por los que hunden al país, será por costumbre, no sé, o porque no encuentran opción.
Hoy que llega una tercera fuerza política no sé qué digan esos millones de mexicanos que por muchos años han votado por los dos partidos tradicionales, ¿votarán por los mismos o cambiarán?
Con la gasolina a 20 pesos el litro y con un alza generalizada, privatización de casi todo, y con una inseguridad creciente, no sé qué digan u opinen ahora. Muchos creen que aplicarán la frase “más vale viejo por conocido que nuevo por conocer”, a lo mejor, pero en esa decisión se jugarán la vida del país.