Elizabeth Soriano / San Jerónimo Xayacatlán, Pue.
Un hombre de origen mixteco, procedente del municipio de San Jerónimo Xayacatlán, fue reconocido como “Tesoro Humano Vivo” por su trayectoria en el impulso de melodías tradicionales en la región, recibiendo una distinción y un estímulo económico de 60 mil pesos.
Fue la Secretaría de Cultura del estado de Puebla la que reconoció la trayectoria de Ernesto Flores Hernández como “Tesoro Humano Vivo”, quien por más de 70 años ha impulsado los xochisones, los cuales son unas melodías tradicionales propias de la región Mixteca, más en específico, del municipio de San Jerónimo Xayacatlán.
El poblano ha interpretado música con violín en distintos eventos de suma importancia para su comunidad, sobre todo en las fiestas patronales, ferias y eventos civiles, siempre con el propósito de seguir promoviendo la difusión de los sones tradicionales de la Mixteca.
Asimismo, pensando en el riesgo de que desaparezca la música mixteca y que los habitantes la olviden, don Ernesto fundó el mariachi San Domingo Tonahuixtla, y siempre se muestra dispuesto para enseñar lo que sabe a todo aquél que sienta amor por la música tradicional.
Bajo la premisa de que nunca sirve el mismo método para enseñar a todos, en su trayectoria ha formado a músicos de varias generaciones, quienes han mantenido vivos los sones mixtecos, aun cuando han emigrado a otras partes del mundo.
Además, su labor de la preservación de la memoria comunitaria se extiende a la difusión de crónicas, anécdotas e historias de su localidad, las cuales transportan a sus alumnos a otras épocas, aquellas donde las bodas mixtecas eran rituales de respeto y compromiso.
Cabe destacar que desde niño don Ernesto observaba con detenimiento a los músicos de su comunidad, lo que despertó la curiosidad de aprender a tocar un instrumento y expresar su sentir; por ello a los 8 años aprendió a tocar el violín, empezando a reproducir sones tradicionales, y con el tiempo desarrollar una técnica única, que refleja en cada tocada del gran talento que posee.
A sus 86 años conoce todos los sones de su localidad, su historia y las temáticas de donde se generan, por lo que es considerado por los contemporáneos como un valioso portador del patrimonio cultural inmaterial comunitario.
Dos poblanos más fueron galardonados
En la Casa de la Cultura “Profesor Pedro Ángel Palou Pérez”, Sergio Vergara Berdejo, titular de la Secretaría de Cultura, también premió a Norberto Huerta, baluarte en el tema de la producción de sal en la región de Zapotitlán Salinas, donde ha laborado y enseñado a las generaciones de jóvenes a trabajar este producto natural, al cuidar el proceso original de esta técnica milenaria. Ha sido distinguido con varios reconocimientos por su trabajo en la comunidad.
Asimismo, los familiares de Josefina Amable Osollo, originaria de Taltzintan Ayotzinapa, comunidad del municipio de Cuetzalan, recibieron su galardón, ya que falleció hace unos días. Fue partera tradicional durante más de 49 años, apoyó a las mujeres que tenían dificultades para tener acceso a una clínica.
Enfocada en la medicina tradicional, Josefina Amable Osollo se convirtió en una guía social en su comunidad y era conocida como “La abuela”.
Por su parte, el secretario Sergio Vergara Berdejo resaltó que los tres “Tesoros Humanos Vivos” han realizado acciones para revitalizar y transmitir el legado de sus antepasados, tanto en usos y expresiones como en conocimientos, técnicas y valores asociados, que les dan fortaleza a los valores de la cultura en Puebla.