Las cosas en Camp Nou estaban tensas porque el Barça ya le había anotado dos al Sevilla. Y pasaditos los primeros 20 minutos, Messi forcejeó con Franco Vázquez. Y pues el forcejeo se hizo un poco rudo y acabaron los dos en el césped discutiendo como caba… fatal, acabó fatal, porque Vázquez recargó todo el cuerpo en el brazo de Messi y se llevó la articulación en el camino.
Messi, no es Neymar. Ya lo saben, no se avienta al pasto por cualquier cosa. Así que verlo tumbado aclaraba que no fue un recargón cualquiera. Y como La Pulga no se levantaba, los médicos entraron a la cancha. Dembélé y Rafinha calentaban esperando noticias y Valverde tenso.
Los médicos vendaron a Messi, aseguraron un poco el brazo, pero Leo no podía ni moverse. Salió de la cancha y de ahí se fueron a la ciudad deportiva del Barcelona para hacerle estudios. “Tiene una lesión colateral en el ligamento lateral interno del brazo derecho”, dijeron desde el club.
A ver cómo pinta el escenario para la semana que viene, porque se enfrentan el miércoles al Inter, en la Champions.