En el país hay 7 mil indígenas que se encuentran recluidos en cárceles mexicanas y a ellos debe alcanzar la amnistía que propone el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
Así lo considera Javier Eduardo López, presidente de la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social, quien detalla que la mayoría de los reclusos tuvieron procedimientos judiciales irregulares.
“Si el crimen organizado puede estar incluido en esta estrategia bien pueden entrar todos los indígenas que han carecido de asistencia, intérpretes y defensores capacitados en sus procesos judiciales”, señaló.
Para Javier Eduardo López, el proceso de pacificación del país que impulsa López Obrador debe incluir la problemática de aquellos que por falta de educación, no hablan español y de una buena defensa que traduzca los delitos de que se les acusa.
Precisó que la mayor parte y se halla principalmente en Oaxaca, Chiapas, Puebla y Veracruz.